Damasco, 16 oct (SANA) En el corazón de Damasco, las vías ya no resuenan como antes; la infraestructura ha caído y las estaciones parecen desoladas. Al-Qadam, antigua conexión con Medina, refleja esa quietud.
El lenguaje del vapor y la historia de Al-Qadam
En 1908, el primer tren partió de Damasco hacia Medina por el Hiyaz, con Al-Qadam como segundo centro más importante de Siria. Era un polo industrial con talleres que sostenían la red regional entre Siria, Jordania y Palestina, según Mazen Al-Mulla (Abu Malek).

Abu Malek, maquinista de vapor durante más de cuarenta años, describe Al-Qadam como un conjunto de talleres de torneado, fundición e hierro, y repuestos para locomotoras, rivales a las europeas de la época.
“Mi abuelo trabajó aquí… aprendí el lenguaje del vapor; el sonido de las ruedas era la música de mis mañanas”, recuerda Malek.
Mazen Al-Mulla añade que el último viaje fue en 2011; al regresar en 2017, encontraron locomotoras destruidas y la estación vacía. Hoy, la Empresa Estatal de Ferrocarriles del Hiyaz rehabilita cuatro locomotoras de vapor y ya hubo un tren turístico entre Al-Rabwa y Dummar, señal de una ruta potencial.
Estación de Al-Qadam: un complejo industrial singular
El historiador Mohammed Al-Baroudi describe la estación como un complejo industrial de más de dos kilómetros cuadrados, con los mayores talleres de mantenimiento de locomotoras de la región y una arquitectura que imita instalaciones europeas de principios del siglo XX.

Al-Baroudi sostiene que la estación debe transformarse en un referente turístico e industrial, y que no basta con restaurar piedras: hace falta resucitar la memoria nacional y la creatividad de la industria siria.
Una voluntad inquebrantable
En 2008 se conmemoró el centenario del viaje a Medina. Tras años de conflicto, los talleres han retomado su labor de forma discreta y los veteranos supervisan la restauración con determinación.

La rehabilitación es un proyecto estratégico para el transporte en Siria, con énfasis en alternativas económicas y sostenibles. La mejora podría impulsar economía, turismo y conectividad regional.
La estación más grande del ferrocarril del Hiyaz
Mahmoud Zarkali, director de Tracción y Maquinaria, indica que Al-Qadam es la estación más grande e importante del sistema, albergando plantas de fabricación y siendo centro clave de la red. Se estudia la rehabilitación y la infraestructura, incluidas líneas, laboratorios y talleres.
Los planes también contemplan un tren suburbano. Aunque la estación fue vandalizada, se trabaja para reconstruir y restablecer la red.
De los escombros de la guerra nace la esperanza
Hoy no ruge un tren en Al-Qadam, pero los andenes esperan. Entre escombros, la esperanza resurge tras la liberación y la reconstrucción. ¿Volverán a la vida los ferrocarriles sirios?
ED/RSH







