Londres, 19 sep (SANA) Un reciente estudio del Imperial College de Londres y la Escuela de Higiene y Medicina Tropical reveló que las olas de calor extremo registradas en Europa durante el verano de 2025 provocaron la muerte de aproximadamente 16.500 personas, directamente atribuibles al cambio climático.
El análisis, que abarcó 854 ciudades europeas, mostró que el 68% de las 24.400 muertes relacionadas con el calor fueron consecuencia directa del calentamiento global.
Según el estudio, las ciudades más afectadas fueron Roma (más de 800 muertes), Atenas (más de 600) y París (más de 400).
Asimismo, más del 85% de las víctimas eran personas mayores de 65 años.
Este es el primer estudio a gran escala que cuantifica el impacto del calor extremo sobre la salud pública en un verano con temperaturas sin precedentes.
Según el programa europeo Copernicus, Europa es actualmente el continente que se calienta más rápido del mundo, con temperaturas que duplican con creces la media global.
Los expertos advierten que el calor extremo puede agravar enfermedades cardiovasculares, causar deshidratación, alterar el sueño e incluso provocar insuficiencia orgánica y muerte.
Estas cifras alarmantes llegan en medio de advertencias sobre el impacto combinado del cambio climático y la contaminación, que triplicó las muertes por calor en 12 ciudades europeas solo en junio de 2025.
rr