“China no se convertirá en otro Estados Unidos. Estados Unidos no puede cambiar a China según sus propios gustos y aversiones. Ninguna de las partes puede derrotar a la otra: lo que se requiere es el respeto por las decisiones de los demás”
Damasco, 24 sep (SANA) Las relaciones entre China y Estados Unidos se encuentran en un punto decaído desde que, en la década de 1970, se establecieron relaciones diplomáticas de ambos países, declaró el jefe del Ministerio de Relaciones Exteriores chino, Wang Yi.
Si Estados Unidos insiste en conducirse como lo hace con China conducirá al conflicto y la confrontación, advirtió el ministro del país asiático.
“China no se convertirá en otro Estados Unidos. Estados Unidos no puede cambiar a China según sus propios gustos y aversiones. Ninguna de las partes puede derrotar a la otra: lo que se requiere es el respeto por las decisiones de los demás”, aseguró Wang Yi.
La Casa Blanca debe respetar la decisión del pueblo chino de seguir la ruta del socialismo con particularidades chinas, del mismo modo que China respeta el camino de desarrollo elegido por el pueblo estadounidense, consideró el ministro de Asuntos Exteriores.
“Se ha ignorado la realidad de la interdependencia entre los dos países, se ha tergiversado la historia de la cooperación ganar-ganar y se han bloqueado los canales de diálogo y comunicación”, acusó el canciller chino durante un discurso en la Asia Society de Nueva York.
La importancia de las relaciones entre China y Estados Unidos, apuntó, trasciende el vínculo binacional y afecta a todo el mundo, dijo Yi, quien también acusó a Washington de fomentar una “narrativa injustificada de la democracia contra el autoritarismo” y de amplificar la confrontación ideológica entre ambas naciones.
“[Estados Unidos] señaló con el dedo al sistema político, la vía de desarrollo y el partido gobernante de China. En tales circunstancias, ¿cómo se puede cumplir el compromiso de no buscar cambiar el sistema chino?”, comentó el funcionario chino.
Yi también cuestionó cómo será posible evitar una nueva Guerra Fría cuando Estados Unidos exige a otros países a elegir bandos y tejer círculos de exclusión hacia China. Asimismo, volvió a criticar que presidenta de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, Nancy Pelosi, viajara a Taiwán pese a la inconformidad explícita de Pekín.
Además, acusó a Estados Unidos de vender armamento a Taiwán mientras procura el mejoramiento de relaciones diplomáticas con la isla, a pesar de que su declaratoria oficial respeta el principio de unidad territorial de China.
También recriminó a Washington continuar su guerra comercial contra el país asiático, pese a la objeción de la Organización Mundial de Comercio (OMC), en un escenario donde los aranceles estadounidenses producen una afectación económica a los productos chinos por 360.000 millones de dólares, además de que más de 1.000 empresas chinas están sancionadas unilateralmente por el país norteamericano.
“En tales circunstancias, ¿cómo mantener la estabilidad de las cadenas industriales y cadenas de suministro entre China, Estados Unidos y el mundo?”, se preguntó el ministro de Exteriores de Pekín.
“Estados Unidos ha lanzado un sinfín de provocaciones sobre temas relacionados con los intereses fundamentales y los derechos de desarrollo de China. Al mismo tiempo, ha propuesto mantener relaciones estables y evitar conflictos y confrontaciones, contradictorias tanto en la lógica como en la realidad”, reprochó Wang Yi.
“El desarrollo saludable y estable de las relaciones chino-estadounidenses todavía depende de si podemos manejar correctamente estas diferencias y perseguir nuestros respectivos intereses comunes sobre esta base”, matizó.
La manera adecuada de conducir las relaciones entre ambos países, dijo el diplomático, es el respeto mutuo, la coexistencia pacífica y la cooperación, conclusiones extraídas de la evaluación de 50 años de altibajos en la relación entre ambas naciones, de acuerdo con declaraciones del presidente Xi Jinping.
Wang Yi agregó que el tema de Taiwán es el mayor riesgo para las relaciones entre China y Estados Unidos si no se maneja de manera adecuada.
Fuente: Sputnik