Washington, 12 dic (SANA) La Comisión Asesora Global sobre la Seguridad de las Vacunas de la Organización Mundial de la Salud (OMS) informó que nuevas revisiones científicas, basadas en los estudios más recientes publicados en los últimos años, no han encontrado ningún vínculo entre la vacunación y el desarrollo del trastorno del espectro autista, reafirmando así conclusiones científicas sólidas vigentes desde hace más de dos décadas.
En su comunicado oficial, la organización precisó que las conclusiones se apoyan en dos revisiones sistemáticas que abarcaron investigaciones realizadas entre 2010 y 2025.
La Comisión indicó que los análisis incluyeron tanto las vacunas en general como aquellas que contienen timerosal, un conservante utilizado en ciertos tipos de vacunas y que ha sido objeto de afirmaciones infundadas que lo relacionan con el autismo. Sin embargo, la evidencia científica ha refutado repetidamente dichas aseveraciones.
Asimismo, destacó que no se puede considerar fiable ninguna supuesta relación sanitaria ligada a las vacunas si no está respaldada por múltiples estudios rigurosos que muestren un vínculo constante y estadísticamente significativo.
La OMS señaló también que 20 de los 31 estudios evaluados no hallaron pruebas de relación entre las vacunas y el autismo. Las otras 11 investigaciones presentaron indicios débiles que fueron descartados por fallas metodológicas evidentes y altos niveles de sesgo.
El trastorno del espectro autista es una condición del neurodesarrollo que afecta la interacción social, la comunicación y el comportamiento. Suele manifestarse en los primeros tres años de vida y se describe como un “espectro” porque su intensidad y características varían de una persona a otra, pudiendo ser leves en algunos casos y severas en otros.
rr