Canberra, 12 nov(SANA) El Tribunal Supremo de Australia falló en contra de la demanda presentada por el Gobierno ruso para continuar la construcción de una nueva embajada en Canberra, situada a menos de un kilómetro del Parlamento nacional.
El alto tribunal afirmó la validez de la ley aprobada por el Ejecutivo australiano en 2023 que bloqueaba el proyecto por motivos de seguridad nacional, aunque determinó que el Estado deberá indemnizar a Rusia por la cancelación del arrendamiento del terreno.
Rusia había alquilado la parcela en 2008 a una agencia gubernamental australiana, a unos 400 metros del Parlamento, y en 2011 obtuvo un permiso de construcción que posteriormente fue anulado por un tribunal federal.
El primer ministro australiano, Anthony Albanese, explicó el año pasado que el Gobierno había recibido «asesoramiento de seguridad claro sobre los riesgos que supone una nueva presencia rusa tan cerca del Parlamento», lo que desató un litigio entre ambos países.
Los abogados de Moscú alegaron que la legislación era inconstitucional, pero el Supremo rechazó sus argumentos y ratificó la potestad del Gobierno australiano para limitar la construcción por razones de seguridad.
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