Damasco, 9 nov (SANA) Los territorios palestinos ocupados, en particular la Franja de Gaza, atraviesan la crisis económica más grave de las últimas décadas debido a la guerra genocida israelí contra el pueblo palestino.
La destrucción sistemática de infraestructura, instalaciones productivas y el sector servicios en la Franja ha provocado un declive catastrófico en los indicadores económicos, según estimaciones del Banco Mundial e informes de la ONU que advierten que la recuperación será larga y ardua, con un costo potencial superior a los 52 mil millones de dólares.
El deterioro de estos indicadores económicos, que incluye el aumento del desempleo y la destrucción de los cimientos de la economía, es el resultado acumulativo de las políticas y medidas israelíes deliberadas implementadas durante muchos años.
El Ministerio de Economía palestino confirmó que la guerra genocida de hace dos años agravó aún más la situación y destruyó, aproximadamente el 85% de las instalaciones económicas e industriales, así mismo elevó las tasas de desempleo y pobreza a más del 80% en la Franja de Gaza, lo que provocó el colapso de la mayoría de las actividades económicas y una disminución de la producción total de casi el 25%.
La referida entidad indicó que los sectores productivos experimentaron un declive sin precedentes, ya que la agricultura y la pesca disminuyeron un 30%, la manufactura, el agua y la electricidad un 33%, la construcción un 57% y los servicios un 27%.
Además, según la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Comercio y Desarrollo (UNCTAD), aproximadamente 5.000 establecimientos económicos cesaron sus operaciones y el PIB se redujo a menos de una sexta parte de su nivel anterior a la guerra.
Asimismo, medios palestinos indicaron que la guerra de aniquilación israelí destruyó lo que quedaba del vital sector industrial, con pérdidas directas estimadas en alrededor de 6.000 millones de dólares, mientras que las pérdidas económicas totales superaron los 33.000 millones de dólares a finales de 2024.
Además, desde el inicio de su guerra de exterminio, la ocupación israelí ha impedido el ingreso de cualquier cantidad de dinero a Gaza, y esto incluye la destrucción de sucursales bancarias y casas de cambio, el deterioro a cajeros automáticos y el colapso de la infraestructura bancaria, lo que causó enormes pérdidas financieras a los bancos, estimadas en miles de millones de dólares.
En cuanto al sector agrícola, las cifras revelan la magnitud del desastre y un colapso casi total, particularmente en la cosecha de aceitunas, de la cual depende la mayoría de los palestinos en la Franja de Gaza.
El portavoz del Ministerio de Agricultura en Gaza, Muhammad Abu Awda, explicó en recientes declaraciones a la prensa que la ocupación israelí destruyó vastas áreas de tierras agrícolas durante su agresión contra Gaza, utilizando diversos métodos, incluyendo el uso de excavadoras, bombardeos y gases tóxicos.
Abu Awda explicó que de las 5000 hectáreas que estaban plantadas con olivos antes de la guerra israelí, solo quedan 400, y la producción también se desplomó a menos de 3.000 toneladas, mientras que antes de la guerra se producían aproximadamente 40.000 toneladas de aceitunas al año, lo que representa una pérdida del 92% de la producción total.
sm