Nueva York, 29 nov (SANA) El Representante Permanente de Siria ante las Naciones Unidas, Ibrahim Olabi, condenó la agresión israelí contra Beit Jinn, población en la zona rural de Damasco, que dejó 13 civiles muertos y decenas de heridos.
Olabi subrayó que Damasco avanza en todos los niveles y no permitirá provocaciones, también anunció que la respuesta se canalizará por vías internacionales, con la protección del pueblo sirio como prioridad. En declaraciones a Al-Arabiya Al-Hadath, afirmó que Damasco emplea todos los esfuerzos diplomáticos para aislar a Israel y limitar el apoyo de sus aliados.
El diplomático señaló que el embajador israelí en la última sesión del Consejo de Seguridad escuchó las posturas de 15 Estados que condenaron las agresiones y defendieron la integridad territorial de Siria y su soberanía. Añadió que se impulsan gestiones para renovar el mandato de la Fuerza de Mantención de la Paz de la UNFOS, con el fin de fortalecer la seguridad a lo largo de las líneas de separación.
Olabi afirmó que la presión diplomática, más que militar, ha generado avances significativos en las relaciones internacionales de Siria y que la cooperación con sus aliados busca impedir que Israel encuentre pretextos para acciones legales, políticas o militares. Sostuvo que estos esfuerzos han dado resultados tangibles en el terreno y aumentan el aislamiento de la ocupación.
El representante enfatizó que Siria habla desde una posición de fortaleza, fruto de avances políticos, económicos y militares, y precisó que una respuesta militar directa no es la opción actual para preservar esos logros. Continúa el trabajo en terreno y en foros internacionales para sostener el Acuerdo de Separación de 1974 y las resoluciones del Consejo de Seguridad, aseguró.
Olabi aseguró haber mantenido contactos con varios miembros del Consejo de Seguridad y afirmó que los hechos de Beit Jinn quedarán documentados en los expedientes de la ONU.
Reiteró los esfuerzos para aislar a la ocupación y exigir responsabilidades por crímenes y agresiones reiteradas. Las conversaciones actuales se limitan a un “acuerdo de seguridad”, mientras el proceso de paz permanece estancado por la ocupación israelí.
Subrayó que las justificaciones de Israel sobre arrestos o amenazas no modifican que se trata de una potencia ocupante; la ONU ha reiterado que el Golán continúa siendo territorio sirio ocupado.
Trece civiles fallecieron y decenas, entre ellos varios niños, resultaron heridos en la ofensiva de este viernes contra Beit Jinn.
Siria condenó el ataque, calificándolo de crimen de guerra, e instó al Consejo de Seguridad, a la ONU y a la Liga Árabe a tomar medidas inmediatas para detener las agresiones y violaciones, disuadir y garantizar el respeto a la soberanía e integridad territorial, conforme al derecho internacional y a la Carta de las Naciones Unidas.
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