Damasco, 27 nov (SANA) El presidente Ahmed Al-Shara afirmó que el aniversario del inicio de la Batalla de la liberación de Siria, que se celebra hoy, es un hito histórico que ha sido ampliamente acogido por la mayoría de los sirios, a pesar de la existencia de un segmento que se vio afectado por sus consecuencias y otro que comprendió su necesidad en el marco de la preservación de la unidad y la seguridad del país, y señaló que el Estado es consciente de que seguirá enfrentándose a muchas objeciones y desafíos.
Durante una llamada telefónica en el marco de la reunión del gobernador de Latakia con dignatarios y comités barriales para reforzar la paz civil, el presidente Al-Shara declaró: “Hemos sido testigos, durante los últimos dos días, de numerosas demandas populares legítimas; sin embargo, algunas de ellas estaban politizadas, si queremos llamar a las cosas por su nombre. El Estado reafirma su plena disposición a escuchar todas las demandas y a debatirlas con seriedad.”
La costa siria está entre las principales prioridades de la acción nacional
El presidente Al-Shara aclaró que la costa siria posee todos los elementos que reflejan la cohesión de la sociedad siria y confirman la fuerza de la unidad nacional, asimismo, su diversidad social y sectaria enriquece al Estado sirio y no es tema de discusión ni controversia.
Explicó: “En cuanto a las propuestas relacionadas con la separación o el federalismo, suelen surgir de interpretaciones limitadas o de una falta de conocimiento político, ya que incluso los Estados federales cuentan con fuertes estructuras centrales en las instituciones soberanas, como defensa, seguridad, relaciones exteriores y economía, que son instituciones que no pueden fragmentarse.”
Aggregó que la integración existente actualmente entre las distintas regiones sirias, tanto en lo económico como en lo social, demuestra que los llamados a la división o la separación reflejan un grado de ignorancia política y de falta de comprensión de la realidad del Estado, incluso el concepto de federalismo, planteado por algunos, no difiere en esencia del marco de la administración local vigente en Siria, especialmente la Ley N.º 107, promulgada hace más de diez años, incorpora de manera efectiva muchos de los conceptos que hoy se proponen, con la posibilidad de introducirle modificaciones.
“Somos el capital los unos para los otros, y cualquier componente que se debilite quedará expuesto a problemas y riesgos”, añadió.
Siria logró avances considerables a pesar de los desafíos
El presidente sirio indicó que Siria ha logrado durante el último año un avance considerable, pese a la carga de desafíos que se remontan a más de 60 años, incluyendo sanciones, presiones y repercusiones internas y externas, además de leyes económicas y sistemas administrativos obsoletos que han demostrado ser ineficaces durante muchos años.
Continuó: “Hoy nos encontramos ante una etapa histórica que comenzó en el momento en que inició la batalla, un día como hoy el año pasado, y este es un momento crucial (una encrucijada) que afecta no solo a Siria, sino que extiende su impacto a toda la región, y en esta circunstancia, la atención mundial se centra en Siria, a la espera de un nuevo comienzo que restablezca el equilibrio y la estabilidad.”
“Es necesario pensar con una mentalidad estratégica y fijar objetivos de largo plazo, dejando atrás las visiones estrechas que no construyen Estados ni garantizan estabilidad. Numerosas experiencias en países que han atravesado conflictos internos han demostrado que los intentos de compartir el poder no siempre conducen a soluciones, sino que pueden permanecer suspendidos durante décadas y agravar la situación cada vez más”, detalló.
No hay alternativa a un proyecto nacional integral
El mandatario sirio indicó: “Hoy nos encontramos ante dos tareas fundamentales para la fase próxima: proteger al país de los riesgos internos y externos, y lograr el desarrollo económico.”
Enfatizó que en muchas ocasiones, los desafíos son tan grandes y apremiantes que resulta imposible afrontarlos plenamente, especialmente en las etapas que siguen a la victoria de las revoluciones o al fin de los conflictos, y estos momentos, los Estados entran en una fase sensible y peligrosa conocida como la espiral posconflicto y de parálisis institucional, y superar sus efectos suele requerir muchos años, además de nuevos elementos y condiciones favorables, mientras persiste el temor constante a una posible recaída en el conflicto, y Siria ha logrado superar esta etapa.
Subrayó que el proceso de construcción requiere tiempo, y la estabilidad y el crecimiento natural de los Estados suelen ser graduales y acumulativos, mientras que los saltos repentinos, a menudo, generan problemas o producen percepciones erróneas, por ello, solo una construcción correcta puede sentar bases sólidas.
Recalcó que, hoy, el Estado está decidido a establecer un nuevo conjunto de leyes y sistemas durante los próximos cinco años, lo que permitirá fundar los pilares de un país fuerte.
“No buscamos glorias personales, hemos vivido períodos en los que estuvimos en el medio del peligro, y el poder nunca fue nuestra principal preocupación, y nuestra prioridad siempre ha sido construir lo que sirve a Siria, su presente y su futuro”, dijo.
La unidad nacional es un pilar fundamental e indispensable
El presidente sirio, explicó que la unidad nacional constituye un pilar esencial e irrenunciable, y Siria ha sido testigo recientemente de un amplio apoyo e interacción de países y pueblos que quieren a Siria, donde, por primera vez, los sentimientos del pueblo coinciden con las posturas de sus líderes respecto a nuestra causa.
“Pensar en objetivos estratégicos a largo plazo es una necesidad urgente en esta etapa. Soy plenamente consciente de la magnitud de los desafíos relacionados con los servicios que enfrentan los ciudadanos, ya sea en electricidad, energía u otros servicios, y estamos trabajando para mejorarlos gradualmente, y el país no puede construirse con una única solución, es necesario trabajar en varias vías simultáneamente, además, es inaceptable reducir este importante momento histórico a simplemente centrarse en los problemas, especialmente mientras la atención mundial se centra en Siria, y se corre el riesgo de abrir nuevamente la puerta a la discordia”, confirmó.
Los sirios están unidos por una ley que protege a todos
El presidente Al-Shara sumó: “Como sirios, nos une una ley que protege a todos, y trabajamos para mantener el principio de participación y ampliar la contribución de los distintos componentes en la construcción del Estado. Hemos rechazado de manera tajante cualquier fórmula de repartición sectaria o polarización del poder dentro de las instituciones del Estado y sus ministerios. Todos somos socios y todos asumimos responsabilidad.”
Además, habló sobre la experiencia en Idlib, que contaba con cerca de cinco millones de habitantes y un gran número de instituciones, dijo: “Se nos ofreció la separación, pero nos negamos categóricamente a que Siria fuera otra cosa que un Estado unificado. Vivíamos en circunstancias muy difíciles, con bombardeos, destrucción y desplazamientos, y más de dos tercios de la población se encontraba en campamentos. A pesar de ello, pudimos ofrecer un modelo económico y de servicios avanzado.”
Agregó: “Hoy, en toda Siria, las oportunidades son mayores y las condiciones son mejores, lo que nos permite vivir con dignidad y estabilidad. Cualquier enfoque estrecho y destinado a intereses personales, no representa la realidad del pueblo sirio, porque nuestra capacidad de convivencia es fundamental, como lo demostró la experiencia.”
Asimismo, el presidente Al-Shara llamó a poner fin al estado de división, y dijo: “ha llegado el momento de poner fin al estado de división que se sembró en los corazones de los sirios durante más de sesenta años. Ahora somos más comprensivos, unidos y capaces de construir Siria juntos. Confiamos en la gran conciencia que poseen los sirios, tanto dentro del país como fuera de él, y en su amor firme hacia su patria, para construir una Siria más fuerte y hacerla resistente a todos los intentos de división.”
sm