Damasco, 13 oct (SANA) El presidente sirio Ahmad Al-Shara, afirmó que reconstruir lo que el depuesto régimen destruyó durante su guerra es una prioridad absoluta para el gobierno, y señaló que el costo de esta operación se estima entre 600 y 900 mil millones de dólares, lo que requiere un amplio apoyo de la comunidad internacional.
El mandatario declaró en una entrevista con el programa “60 Minutes” de la cadena CBS News, que “el mundo ha presenciado esta tragedia durante 14 años y no ha podido evitar este grave crimen, por lo que hoy debe brindar apoyo a Siria”.
El presidente Al-Shara aclaró que las sanciones económicas internacionales impuestas a Siria están obstaculizando los esfuerzos de reconstrucción, y enfatizó que cualquiera que obstruya su levantamiento se convierte en cómplice del crimen cometido.
Afirmó que Siria merece vivir en paz y seguridad, y que esto redunda en el interés de la región y del mundo, al tiempo que aseguró que el país estará abierto a alianzas internacionales que respeten su soberanía.
El Gobernante explicó que generaciones enteras de sirios han sufrido un tremendo trauma psicológico como consecuencia de la guerra, que causó la muerte de más de un millón de sirios, destruyó gran parte del territorio sirio y su infraestructura, y desplazó a millones de personas como refugiados en el extranjero y desplazados internos.

Indicó que se utilizarían medios legales para enjuiciar a Bashar Al-Assad, quien ha huido a Rusia.
En cuanto a los sucesos en la región costera y Sweida, el presidente Al-Shara dijo que se trata de un asunto interno que debe resolverse legalmente, y que el Estado se compromete a enjuiciar a todos aquellos que hayan cometido crímenes contra civiles, independientemente de su partido.
Respecto a las repetidas agresiones israelíes, el presidente Shara afirmó que «Siria no ha provocado a Israel desde nuestra llegada a Damasco y no quiere que represente una amenaza para Israel ni para ningún otro país».
Puntualizó que el ataque al palacio presidencial no pretendía enviar un mensaje, sino más bien una declaración de guerra. Sin embargo, Siria no quiere librar una guerra.
Enfatizó que Israel debe retirarse de cualquier territorio que haya ocupado después del 8 de diciembre.
Reiteró que había roto vínculos con ISIS y Al-Qaeda, y afirmó que “si hubiera estado de acuerdo con ellos, no los habría abandonado”.
Hoy es importante dar esperanza a la gente para la reconstrucción y el regreso a sus hogares, y la reconstrucción no se limita a la infraestructura, sino que también incluye tratar el trauma psicológico dejado por la guerra, afirmó el jefe de Estado.
fm/as