Hassakeh, SANA
La milicia “Asayish” – cuerpo de seguridad de las denominadas Fuerzas Democráticas de Siria (FDS)- continúa sus prácticas terroristas contra civiles en las ciudades de Hassakeh y Qamishli, y en numerosas localidades del campo de la provincia de Hassakeh, en el nordeste de Siria.
Entre las prácticas ilegales de esas milicias es la imposición de enfoques y programas educativos diferentes a los adoptados por el Ministerio de Educación, además del lanzamiento de campañas de arrestos contra jóvenes para obligarlos a insertarse en sus filas.
Por segundo día consecutivo, los vecinos del barrio Al-Nashwah en el centro de la cabecera provincial Hassakeh, salieron a las calles para protestar contra las medidas de la milicia “Asayish” de impedir a los niños y jóvenes de dirigirse a las escuelas que adoptan el plan de estudios oficial del Ministerio de Educación.
Los manifestantes afirmaron en declaraciones al corresponsal de SANA que las patrullas de la “Asayish” bloquean desde el jueves a los autobuses y vehículos que trasladan a los estudiantes que provienen de las zonas que rechazan el plan de estudio impuesto para que no lleguen a los centros de estudios que adoptan el plan de estudio gubernamental.
Los manifestantes lanzaron gritos de rechazo a los planes de estudio que la milicia Asayish quiere imponer por la fuerza en las escuelas, y dirigieron un llamado para poner fin a estas agresiones contra el proceso educativo y detener las acciones irresponsables de las milicias que amenazan el futuro de la población de la provincia.
La Directora de Educación en Hassakeh, Ilham Surkhan, afirmó en una declaración a SANA que las milicias del “Asayish” impidieron que los estudiantes asistieran a las escuelas e impidieron a los medios de transporte que trasladan a los estudiantes y maestros de las zonas rurales de ingresar en las ciudades de Hassakeh y Qamishli.
Reveló que los alumnos, en claro desafío a estas medidas arbitrarias, completaron su viaje a sus escuelas y el porcentaje de asistencia en las escuelas en Hassakeh llegó a 40% y en Qamishli a 60%.
En un contexto relacionado, la milicia “Asayish” intensificó sus arrestos llevados a cabo contra los civiles, especialmente los jóvenes, para obligarlos a afiliarse a las milicias armadas.
F. Marouf