La Haya, 30 nov (SANA) El representante permanente de Siria ante la Organización para la Prohibición de las Armas Químicas (OPAQ) en La Haya, Milad Attiya, denunció que los crímenes de guerra y el genocidio cometidos por “Israel” en Gaza constituyen un ejemplo flagrante de las políticas coloniales y del doble rasero de Estados Unidos y algunos países occidentales.
Attiya explicó ante el vigésimo octavo período de sesiones de la Conferencia de los Estados Partes que firmaron la Convención sobre Armas Químicas, que los Estados Unidos y algunos países occidentales son cómplices en la bárbara y sangrienta agresión israelí a la Franja de Gaza y en la guerra de limpieza étnica que causó la muerte de unos 15.000 palestinos, la mayoría son niños y mujeres, y el desplazamiento de cientos de miles.
“Estos países incentivaron Israel a cometer estos crímenes y le ofrecieron cobertura en las Naciones Unidas y el Consejo de Seguridad, y también, le enviaron miles de toneladas de municiones y equipo militar, y le asignaron un apoyo financiero de más de 14 mil millones de dólares estadounidenses para su guerra genocida, lo que desvela el alcance de la hipocresía occidental y su palabrería sobre los derechos humanos y respeto al derecho internacional”, indicó.
El diplomático manifestó el apoyo de Siria a la solicitud presentada por Palestina a la OPAQ para investigar el uso por parte del ocupante israelí de armas internacionalmente prohibidas, incluidas sustancias tóxicas como las armas químicas, durante su agresión contra la Franja de Gaza.
“La entidad israelí, que posee todos tipos de armas de destrucción masiva y armas nucleares, se niega a implementar las resoluciones de la ONU relacionadas con la no proliferación y emplea mentiras como de costumbre para encubrir sus crímenes”, puntualizó.
Aseguró que no se logrará la universalidad de la Convención sobre Armas Químicas sin obligar a “Israel” a adherirse a la Convención y al resto de acuerdos internacionales relacionados con la No Proliferación de armas de destrucción masiva.
“Las declaraciones de los ministros del gobierno de ocupación israelí sobre la posibilidad de atacar Gaza con un arma nuclear confirman lo que “Israel” siempre ha ocultado y es el hecho de que posee esta arma fuera de los sistemas de control internacional, lo que constituye una grave amenaza para la seguridad y la estabilidad de la región, consideró el delegado sirio.
Denunció que Estados Unidos y algunos países occidentales trabajaron para involucrar a la OPAQ en cuestiones geopolíticas y de seguridad de carácter regional e internacional, lo que llevó a que la Organización se desviara de los objetivos para los cuales fue creada y la convirtió en una herramienta al servicio de agendas geopolíticas.
La mejor evidencia de esto es el intento de atentar contra Siria y la Federación de Rusia al dirigir falsas e infundadas acusaciones de utilizar armas químicas o prepararse para utilizarlas”, precisó.
Al final denunció que Siria fue sometida durante los últimos 10 años a una campaña sin precedentes de acusaciones falsas por parte de países occidentales, cuyo objetivo principal es ejercer más presión y actos de agresión directa e indirecta contra Siria.
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