El Cairo, 17 abr (SANA) El arzobispo Krikor Koussa, obispo de Alejandría, aseguró a los católicos armenios, afirmó hoy que el pueblo sirio está unido y nadie puede dividirlo y demostró disposición de ofrecer sacrificios para que su país se quede fuerte.
“Oremos para que la paz reine en el mundo y terminen los males, las guerras y el terrorismo que se están volviendo más feroces”. Dijo el arzobispo en una declaración al corresponsal de SANA en El Cairo concedida después de la misa de Pascua.
Destacó que el pueblo sirio mantiene fe pesar de la guerra que se desató en su contra y las dificultades que enfrenta.
“En el pasado, el presente y el futuro, éramos y seguimos siendo un solo pueblo y un solo tejido, y nadie puede separarnos unos de otros, y todos estamos dispuestos a darlo todo para que Siria siga viva y fuerte”, agregó.
El arzobispo Koussa rindió homenaje a Siria, a sus heroicos mártires y al firme pueblo sirio.