SANA en Español
Damasco, 4 abr (SANA) 400 metros de distancia no significan nada una persona en pleno estado de salud, pero resultan difíciles para el herido de guerra Amer Sammour, que perdió el 85 por ciento de su movimiento físico y tiene que utilizar una silla de ruedas para ir a trabajar, pero al mismo tiempo su silla de ruedas fue testigo de su logro de la Copa de la República de bádminton.
Sammour, de 33 años, mientras entrenaba en el instituto para la formación de discapacitados en Damasco, dijo a SANA que recibió un disparo en el cuello mientras defendía la patria en un enfrentamiento con organizaciones terroristas armadas.
“Al principio, enfrenté muchas dificultades para adaptarme a la lesión y usar la silla, especialmente porque era un campeón deportivo en artes marciales, pero quería demostrarles a todos que el lesionado puede llevar su vida normalmente si tiene la voluntad y la determinación”, explicó, y agregó que volvió a practicar deportes y en 2019 ganó la Copa de la República de bádminton.
Sammour agrega que sueña con ser campeón a nivel mundial y representar a su querida patria en los campeonatos internacionales, asimismo indicó que practicaba el deporte con amor y pasión, pero era necesario pensar en el trabajo para asegurar una vida digna a su familia, y actualmente esta trabajando en un taller de costura y que se ha vuelto profesional también en este oficio.
Sammour concluyó diciendo que los nuevos comienzos siempre son difíciles, pero con la voluntad y la determinación se pude encontrar la forma de seguir siendo personas activas en la sociedad.
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