Damasco, 17 mar (SANA) Un “manicomio” donde sus ‘pacientes’ están siendo “incitados al odio” hacia todo lo vinculado con Rusia, al tiempo que, quienes rechazan comer este cuento, son tratados como ‘enfermos violentos’. Así describe el ambiente en Occidente la psiquiatra Martina Soto Kohler, residente en Suiza.
La también coordinadora general de los egresados latinoamericanos de la URSS y de Rusia denunció a Sputnik que hasta fue “agredida gratuitamente”, simplemente por su simpatía hacia el gigante euroasiático, país donde estudió psiquiatría infantil.
En este último contexto, comunicó que, fruto de la propaganda antirrusa, se registraron agresiones contra alumnos rusos por parte de niños suizos “que en general fueron muy educados”.
Al mismo tiempo, los intelectuales del país “solicitados” por los medios nacionales reconocen en privado su miedo ante el acoso en caso de que se atrevan a expresar una visión distinta del conflicto de Ucrania, a la de la narrativa dominante que pinta a Rusia como el malo de la película.
“Todos los canales del mundo están en esa guerra mediática contra Rusia donde mienten terriblemente”, subrayó Soto Kohler, al indicar que, por otro lado, “eso es una oportunidad para Rusia de darse cuenta de que no puede hacerle confianza” a Occidente.
“Me doy cuenta de que los europeos tienen un sentimiento antirruso que no es de hoy, sino que viene de muchos años. Antes decían que no querían a Rusia porque era comunista, pero no era ese el problema, porque hoy Rusia dejó de ser comunista, pasó a ser un país que adoptó el sistema capitalista, que intercambia con el mundo entero, y sin embargo, la siguen atacando, o sea, el problema es otro: el problema es que quieren destruir a Rusia, partirla en mil pedazos como lo hicieron con otros países, por ejemplo, con Yugoslavia”, enfatizó.
Soto Kohler es una de las firmantes de una declaración conjunta de los egresados de universidades soviéticas y rusas, donde se expresa la solidaridad con Moscú “en las presentes circunstancias difíciles para el pueblo ruso, cuando el país está casi completamente rodeado por el agresivo bloque de la OTAN con el apoyo directo de EEUU”.
Se lee en el texto que los medios occidentales desataron “una guerra psicológica contra Rusia y su presidente”, habiendo una “desinformación total” que confunde hasta a “algunos líderes latinoamericanos”.
Además, se manifiesta el apoyo a “las poblaciones de las Repúblicas de Donetsk y Lugansk”, donde Rusia se vio obligada a garantizar su seguridad.
Por último, se subraya que Rusia, país que “liberó a Europa y a todo el mundo del fascismo alemán, volvió a enfrentar una amenaza neonazi” proveniente del régimen de Kiev, que atenta contra los intereses del pueblo ucraniano.
Fuente: Sputnik