Damasco, 23 dic (SANA) La reunión conjunta de los dos órganos ministeriales ruso-sirios de coordinación sobre el regreso de los desplazados afirmó que el retorno de los mimos a sus hogares es una prioridad nacional para el Estado sirio.
Los dos órganos, al finalizar su reunión, destacaron en una declaración los esfuerzos realizados por las autoridades sirias en las zonas liberadas, para reconstruir la infraestructura dañada y restablecer la vida normal con el objetivo de asegurar un regreso seguro de los sirios desplazados a sus hogares.
La declaración indicó que desde septiembre de 2018, 2.338.141 ciudadanos sirios regresaron a sus casas, destacando el apoyo brindado por Rusia.
Señaló que en el marco del desarrollo de la cooperación entre los dos países y la prestación de apoyo humanitario integral al pueblo sirio, la Federación de Rusia organizó, en los meses de julio y noviembre, visitas de trabajo para delegaciones ministeriales conjuntas y se firmaron 10 acuerdos.
Además, se entregaron 7.751 toneladas de ayuda humanitaria a Siria en 2021 proporcionada por las autoridades ejecutivas, regiones y organizaciones rusas, que incluyeron generadores, equipos médicos, medicinas y alimentos, y también, se llevaron a cabo aproximadamente 183 operaciones humanitarias en todo el país.
La declaración llamó a ampliar el alcance de la asistencia humanitaria e intensificar el trabajo de recuperación temprana, señalando que la situación humanitaria sigue siendo crítica en las zonas controladas por los países occidentales, especialmente en el campamento de Rukban, donde la situación se ha vuelto catastrófica y sus residentes sufren por la escasez de alimentos y la falta de acceso a la educación y la atención médica adecuada.
Señaló que la situación también está en crisis en las zonas ocupadas por parte de EEUU en el oriente del país y en el campamento de Al-Hol, donde se registraron 84 asesinatos y 23 intentos de asesinato de los pobladores del campamento, lo que indica la incapacidad real de Washington y sus herramientas para controlar la situación y garantizar la seguridad en las áreas que ocupan.
Agregó que las cuestiones humanitarias continúan politizándose, señalando que el envío del convoy en agosto pasado, que fue fletado por las Naciones Unidas a Idlib, está todavía en almacenes.
En este sentido, la provisión de ayuda humanitaria a los residentes de Idlib, que fue aprobada por el gobierno sirio bajo los auspicios de las Naciones Unidas, se pospone constantemente, lo que contradice la resolución del Consejo de Seguridad y atestigua la intención de Occidente de seguir apoyando los focos controlados por las agrupaciones armadas para mantener la tensión en el país.
La declaración también llamó a concentrar los esfuerzos internacionales para brindar asistencia humanitaria a Siria, además de levantar las sanciones ilegales al pueblo sirio para dar un nuevo impulso a una solución política a la crisis en el país.
sm/rsh