Damasco, SANA
El embajador de Rusia en Damasco, Alexander Kenshak, afirmó que “Moscú seguirá suministrando a Siria con todo lo que sea necesario para asegurar la capacidad de defensa de las fuerzas armadas sirias, teniendo en cuenta que Siria y Rusia están en la misma trinchera y enfrentan a un enemigo común que es terrorismo internacional.
En su primera entrevista después de asumir sus funciones como embajador de la Federación Rusa en Damasco, Kenshak declaró a SANA que el papel de Rusia en relación con la crisis siria consiste en suministrar al gobierno legítimo de Siria con todo lo que sea necesario para combatir al terrorismo y contribuir a la creación de una atmósfera que ayude a solucionar la crisis a través de los medios políticos.
El embajador ruso explicó que “Moscú no tiene ninguna intención de moverse hacia una acción militar directa porque cree en el principio de la inutilidad de la intervención en los asuntos internos de los Estados.”
Por otro lado, destacó que “no existe una solución militar a la crisis en Siria y que la única solución posible es la solución política”, señalando que los propios sirios son los que toman las decisiones y tienen que ponerse de acuerdo sobre el destino de su país.
Con respecto a la segunda reunión de consulta de Moscú que ha comenzado el lunes, el embajador Kenshak señaló que “Rusia está trabajando para asegurar un clima adecuado para llegar a algún tipo de acuerdo que sea aceptable para todas las partes interesadas.”
“La única forma es luchar contra los terroristas extranjeros y eliminarlos por la fuerza y esto es un deber fundamental de todos los países y gobiernos del mundo”, precisó el diplomático ruso.
Sobre la formación de Washington a la llamada “oposición armada”, el embajador ruso calificó esto de un “proyecto fallido” que no ayuda a forjar una solución política.
Fady M., Hala B.