Jerusalén ocupada, SANA
El Ministerio de Exteriores de Palestina reiteró su llamamiento a la comunidad internacional para que adopte medidas urgentes que pongan fin a las violaciones del ocupante israelí a los lugares santos, musulmanes y cristianos, en Palestina ocupada, en particular la Mezquita Al-Aqsa.
“Violar los lugares sagrados palestinos por parte de la ocupación israelí contraviene el derecho internacional y forma una escalada peligrosa destinada a crear un nuevo hecho consumado, judaizar la Ciudad Santa de Jerusalén, distorsionar su herencia y desdibujar sus rasgos y su identidad árabe palestina”, dijo la cancillería.
Denunció que el silencio de la comunidad internacional con respeto a esas violaciones alienta al ocupante a continuar sus crímenes.
“Pedimos a los organismos de la ONU, especialmente la UNESCO y el Consejo de Derechos Humanos, que tomen medidas urgentes para detener estas violaciones y prestar protección a los lugares sagrados palestinos”, agregó.
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