Hasakeh, SANA
La planta de agua potable Aluk en el norte de la provincia de Hasakeh fue suministrada con electricidad para reanudar el bombeo de agua tras 10 días de interrupción por el ocupante turco y sus mercenarios que privaron a alrededor de un millón de sirios del agua potable.
“Los esfuerzos diplomáticos sirios e internacionales y la campaña de presión contra el régimen turco llevaron al funcionamiento de la planta tras ser suministrada con electricidad”, informó el corresponsal de SANA en Hasakeh.
Explicó que la electricidad llegó a nueve de 30 pozos en la planta, y después del funcionamiento de las bombas el agua se tarda el agua 12 horas en llegar a la ciudad de Hasakeh ya que el conducto de agua tiene 70 kilómetros de largo.
Añadió que la solución final al problema del suministro de agua potable requiere permitir a los trabajadores entran en la planta para supervisar su funcionamiento.
Cabe destacar que el ocupante turco y sus mercenarios cortaron el agua de la ciudad de Hasakeh y sus alrededores privando a casi un millón de personas de agua potable.
Esta es la decimoquinta vez que las fuerzas de ocupación turcas cortan el agua de la ciudad en los últimos ocho meses.
A. H./ F. M.