SANA en Español
Nueva York, SANA
El delegado permanente de la República Árabe Siria ante las Naciones Unidas en Nueva York, Bashar Jaafari, exigió al secretario general de la ONU, António Guterres, intervenir de inmediato y desplegar buenas gestiones para detener el crimen del régimen turco de cortar el agua potable a alrededor de un millón de ciudadanos sirios en la ciudad de Hasakeh y sus alrededores.
Esto tuvo lugar durante una llamada telefónica realizada por Jaafari al secretario general de la organización internacional para ponerlo al tanto de la situación trágica en la ciudad de Hasakeh y sus alrededores a consecuencia del corte de agua potable, y afirmó que el comportamiento agresivo del régimen turco constituye un crimen de guerra y de lesa humanidad.
Según Jaafari, las tropas de ocupación turcas utilizan el agua como arma contra los civiles y priva a más de un millón de civiles del agua al cortarla de forma repetitiva por más de 15 veces y durante muchos días, como represalia por su postura de apoyo al gobierno y de rechazo a la ocupación turca.
El delegado permanente afirmó que la situación resultante de ese crimen es insoportable sobre todo a la sombra del calor y la propagación de la pandemia del nuevo Coronavirus.
Hizo recordar a Guterres las cartas oficiales enviadas a él y a los presidentes del Consejo de Seguridad, inclusive la queja fechada en el 31-05-2020 que contenía declaraciones sirias en el Consejo de Seguridad al respecto, la última de las cuales fue el 19 del mes en curso durante la sesión sobre la situación política en Siria.
Por su parte, Guterres dijo que está enterado de la situación y que encomendó al equipo de la ONU en Siria y a su enviado especial, Geir Pederson, “hacer lo propio para enmendar esta cuestión y garantizar que se solucione urgentemente y hacer llegar las ayudas humanitarias a los damnificados hasta que se reanude el funcionamiento de la planta de bombeo de Aluk”.
Aclaró que él puede imaginarse la situación a la sombra del fuerte calor y la ausencia de agua potable.
Guterres agregó que este problema debe resolverse urgentemente y que él desplegará su máximo esfuerzo con el gobierno turco y las otras partes y, a través de sus representantes sobre el terreno para aplicar una presión por resolver esta cuestión.
RSH/ RR/F.M
