Damasco, SANA
El Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) rechazó el corte del agua potable por parte del régimen turco y sus organizaciones terroristas, y consideró que eso pone en peligro la vida de aproximadamente medio millón de personas.
El representante del UNICEF en Siria, Fran Ekitha, dijo en un comunicado publicado en el sitio web de la organización, que la planta de agua de Aluk ha sido nuevamente interrumpida, lo cual obstaculiza los esfuerzos actuales para luchar contra el Coronavirus y pone en peligro la vida de niños y familias enteras que no pueden lavarse las manos con agua y jabón.
Explicó que la referida planta es la principal fuente de agua para unas 460 mil personas que viven en la ciudad de Hasakeh y sus alrededores, y llamó a no usar las fuentes de agua para obtener logros militares o políticas porque los niños serán los más afectados y estarán al frete de aquellos que sufren.
Indicó que la organización y sus socios apoyan a los ciudadanos en la ciudad de Hasakeh y en los campos de desplazados a través de camiones de agua potable, pero apenas cubren las necesidades mínimas.
F.M