SANA en Español
Ginebra, 22 sep (SANA) El representante permanente de Siria ante la Oficina de las Naciones Unidas y otras organizaciones internacionales en Ginebra, el embajador Haider Ali Ahmed, denunció hoy la continuación de la escandalosa explotación de los derechos humanos y la situación humanitaria en Siria para la aplicación de agendas de presión política y chantaje.
Este postura fue expresada por Ali Ahmed dijo durante un diálogo interactivo con la Comisión Internacional de Investigación sobre Siria que celebró una sesión en el marco del 54º período de sesiones del Consejo de Derechos Humanos en Ginebra.
Ciertos países hostiles imponen reuniones, mecanismos e informes politizados, selectivos y subjetivos dirigidos contra países específicos, en este caso Siria, sin que esto tenga ningún resultado real o relación con la protección y promoción de los derechos humanos, afirmó el diplomático.
Aseguró que repetir tales reuniones es un acto absurdo y una pérdida de los recursos, el tiempo y el esfuerzo, y consideró que en cada sesión se escuchan las declaraciones de ciertos países que miran al Consejo de Derechos Humanos nada más como una herramienta que emplean para favorecer sus agendas políticas.
El delegado sirio repudió que la referida Comisión de Investigación ha estado insistiendo desde el comienzo de la guerra en Siria hace 12 años, en continuar con el mismo enfoque sesgado y en su lectura no objetiva de la situación en Siria, sus causas y consecuencias, por lo que nos encontramos nuevamente ante distorsiones deliberadas de los hechos.
Explicó que este comité se ha involucrado repetidamente en la evaluación de cuestiones fuera de su mandato, y continúa ignorando cuestiones que se encuentran en el centro de los derechos humanos y que tienen una relación causal directa con la el continuo deterioro de las condiciones humanitarias y de vida en Siria.
Me refiero a los efectos de la presencia militar extranjera ilegal y el terrorismo, que sigue siendo apoyado por los Estados que patrocinan el mandato del Comité, y la responsabilidad de los Estados Unidos por varios de sus prácticas ilegales contra el pueblo sirio, incluidos los actos de agresión, apoyo a grupos separatistas y el continuo saqueo de recursos naturales y cultivos agrícolas, puntualizó.
Por otro lado, señaló que las agrupaciones terroristas impiden la llegada de la ayuda humanitaria a la población, sin embargo no escuchamos ni una sola palabra de crítica en el Consejo de Derechos Humanos ni por parte del comité a estos radicales.
Al final de su intervención, llamó a retirar las fuerzas militares ocupantes, estadounidenses y turcas, de todos los territorios sirios, restablecer la autoridad estatal sobre ellos, apoyar los esfuerzos destinados a facilitar el regreso de las personas desplazadas y refugiadas a sus hogares y levantar inmediata e incondicionalmente las medidas coercitivas unilaterales.
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