SANA en Español
Nueva York, 10 mar (SANA) Siria confirmó que países bien conocidos siguen encubriendo los delitos de las organizaciones terroristas y politizando el llamado “archivo químico”.
También destacó que ya se deshizo de su arsenal de estas armas, destruyó sus instalaciones de producción y ha estado dispuesta a abordar algunos puntos pendientes a través de su cooperación con la Organización para la Prohibición de las Armas Químicas para cerrar definitivamente este expediente.
El representante permanente adjunto de Siria ante las Naciones Unidas, Ministro Consejero Qusay al-Dahhak, dijo durante una sesión del Consejo de Seguridad: “El 19 de marzo de 2013, grupos terroristas dispararon un proyectil que contenía productos químicos tóxicos en el área de Khan al-Asal en la provincia de Alepo, que provocó la muerte de 25 personas, la mayoría miembros del Ejército Árabe Sirio, y otros 110 casos de asfixia, por lo que Siria solicitó al exsecretario general de las Naciones Unidas que formara una misión técnica independiente para investigar el incidente, pero desafortunadamente la misión se formó tardíamente y nunca ha visitado el lugar donde se produjo el hecho.
“En el contexto de su cooperación, Siria presentó su 99°informe mensual sobre actividades relacionadas con la destrucción de armas químicas y sus instalaciones de producción, y aún se trabaja para realizar la reunión de alto nivel entre el Ministro de Relaciones Exteriores y Expatriados y el Director General de la organización”, agregó.
Al-Dahhak subrayó que el éxito de la OPAQ en el cumplimiento de su mandato no se logra ejerciendo presión o politizando el trabajo de sus órganos, sino mediante la revisión integral de sus métodos de trabajo incorrectos para evitar que estos se conviertan en una herramienta al servicio de las agendas de algunos países en detrimento del régimen de no proliferación.
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