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El Cairo, 07 mar (SANA) El Consejo de la Liga de los Países Árabes, al concluir su 161º período ordinario de sesiones a nivel ministerial en la sede de la Liga en El Cairo, con la participación de una delegación siria encabezada por el ministro de Asuntos Exteriores de Siria, Faisal Al-Mekdad, adoptó la resolución titulada: “El Golán Árabe Sirio Ocupado”, mediante la cual afirmaron el apoyo y respaldo a Siria y su derecho a recuperar en su totalidad el Golán sirio ocupado hasta la línea del 4 de junio de 1967 con base en las referencias internacionales pertinentes.
Además, el Consejo indicó la invalidez e ilegitimidad de la decisión de la ocupación israelí de imponer sus leyes y jurisdicción en el Golán ocupado, y manifestó su rechazo y condena a la decisión estadounidense con respecto al Golán.
De igual manera, los ministros de Relaciones Exteriores árabes condenaron las prácticas de ocupación en el Golán ocupado, como la confiscación de tierras agrícolas, el saqueo de recursos naturales y el agotamiento de las riquezas subterráneos y el agua, y enfatizaron que estos recursos son propiedad exclusiva del pueblo del Golán sirio ocupado.
Asimismo, el Organismo aprobó la resolución titulada: “Evolución de la situación en la República Árabe Siria”, que afirmó el interés de los Estados miembros por la soberanía de Siria y su unidad e integridad territorial, y expresó su total solidaridad con Damasco para hacer frente a los desafíos que afectan su seguridad y estabilidad.
La antes mencionada resolución se refirió a la reunión de los ministros del interior de Siria, Jordania, Líbano e Irak, que se celebró en la capital jordana, Ammán, el 17 de febrero, y destacó el apoyo a los esfuerzos para combatir el terrorismo en Siria.
La entidad llamó a intensificar la cooperación entre Siria, los países interesados, las Naciones Unidas y la comunidad internacional con el fin de desempeñar un papel eficaz en la eliminación del terrorismo en todas sus formas y manifestaciones, así como erradicar todas sus fuentes.
Del mismo modo, la junta manifestó su apoyo a Siria y sus instituciones en sus esfuerzos legítimos por preservar la soberanía y seguridad del país.
Igualmente, la referida asamblea expresó su rechazo a la injerencia extranjera en los asuntos de Siria, así como a cualquier presencia militar ilegal en sus territorios, ya que esto constituye una grave amenaza a la unidad de la nación, una violación de la soberanía siria sobre todo su territorio y un peligro para la seguridad y la estabilidad en la región.
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