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“Siria no regatea sobre su independencia y rol clave en la región y el mundo, y siempre defendió a los pueblos del Orbe”, reafirmó el Canciller.
Damasco, 16 jun (SANA) El ministro de Exteriores y Emigrantes, Faisal al-Mekdad, afirmó que Siria, a pesar de las medidas coercitivas y el embargo económico, continúa trabajando por el retorno de los desplazados y refugiados a sus ciudades y poblados.
Los países occidentales impiden el regreso de esos desplazados y los estimulan a permanecer fuera de su patria y a la vez responsabilizan al Estado sirio por el no retorno de los desplazados bajo el pretexto de no preparar las condiciones adecuadas para tal regreso, dijo el Canciller.
Según el jefe de la diplomacia, “Siria es la cuna de la humanidad, en cambio las potencias occidentales distan mucho de esa dimensión humanista en sus políticas, pues practicaron el colonialismo feroz y hoy día ejercen la explotación política y económica en todos sus sentidos”.
Señaló que el Occidente salvaje no pronunció ni una palabra de condena a la última agresión israelí que dejó fuera de servicio al Aeropuerto Internacional de Damasco, y privó a decenas de ciudadanos de usar un medio de transporte para viajar hacia el interior o el exterior.
Remarcó que la destrucción en Siria y el sufrimiento que afecta a los ciudadanos son fruto de la voluntad de EEUU, Gran Bretaña, Francia y otros.
“Siria no regatea sobre su independencia y rol clave en la región y el mundo, y siempre defendió a los pueblos del Orbe”, reafirmó.
Por otro lado, denunció que el ocupante turco en el noroeste de Siria se alía con el ocupante israelí en el sur y con el estadounidense en el campo Rukban y el nordeste de Siria, pues todos orquestan agresiones repetidas para obligar al ciudadano sirio a abandonar su patria para convertirse en refugiado”.
Al-Mekdad reiteró “el posicionamiento de Siria con los amigos rusos que defienden la seguridad nacional de su país para configurar un nuevo futuro de la humanidad lejos de la hegemonía brutal de Occidente que desprecia los derechos de los pueblos”.
“Occidente quiere continuar su dominio en el mundo y no quiere que ninguna otra fuerza se interponga a sus ambiciones geopolíticas, porque está en contra de las aspiraciones legítimas de los pueblos, inclusive el pueblo palestino que busca instaurar un estado independiente en su territorio”, agregó.
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