Los trabajadores de esta central han adquirido en los últimos años una enorme experiencia y capacidad para hacer frente a cualquier emergencia derivada de las circunstancias difíciles y los ataques terroristas, en particular en cuanto a encontrar piezas de repuesto que actualmente no están disponibles debido a las medidas económicas unilaterales.
Damasco, 30 abr (SANA) A medida que se aproxima el Día Internacional de Trabajadores que cae el 1 de mayo, los técnicos e ingenieros de la central eléctrica de Deir Ali, ubicada a 50 kilómetros al sudeste de Damasco y considerada una de las mayores de Siria, hacen enormes esfuerzos para mantener operativa su instalación a pesar de las dificultades resultantes de la guerra y el bloqueo.
Los trabajadores de esta central han adquirido en los últimos años una enorme experiencia y capacidad para hacer frente a cualquier emergencia derivada de las circunstancias difíciles y los ataques terroristas.
Estos obreros muestran determinación para superar todas las dificultades y obstáculos, especialmente en cuanto a encontrar piezas de repuesto que actualmente no están disponibles debido a las medidas económicas unilaterales sobre Siria.
Los electricistas de la central trabajan como una colmena, soportando altas temperaturas en verano y bajísimas temperaturas en invierno, para preservar su instalación y mantenerla operativas a pesar de la dificultad de conseguir repuestos debido al injusto asedio económico a Siria.
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