Nueva York, SANA
El representante permanente de Siria ante las Naciones Unidas, Bassam Sabbagh, dijo que algunos países siguen adoptando doble rasero y políticas selectivas para hacer frente a las amenazas terroristas globales y explotarlas para servir sus estrechos intereses.
En su lectura a la declaración de Siria presentada ante la Asamblea General sobre la cláusula No. 123 titulada “La séptima revisión periódica de la Estrategia integral de las Naciones Unidas contra el terrorismo”, el delegado sirio pidió tomar medidas serias y decididas para garantizar la prevención de los flujos de terroristas extranjeros y hacer que los gobiernos de los países que los operan rindan cuentas.
Instó a trabajar para evitar el uso del terrorismo como una herramienta para servir las políticas exteriores de algunos Estados miembros.
El delegado sirio reiteró la prioridad de la titularidad y el liderazgo nacionales de los esfuerzos para combatir el terrorismo en cooperación con las Naciones Unidas y sus órganos pertinentes para garantizar el respeto de la soberanía y la independencia de los Estados, y no utilizar la lucha contra el terrorismo como pretexto para interferir en los asuntos internos de los Estados o lanzar agresiones contra ellos u ocupar partes de sus territorios sobre la base de una interpretación distorsionada de la Carta Las Naciones Unidas, especialmente el Artículo 51 de la misma, las disposiciones del derecho internacional, y las resoluciones de legitimidad internacional relacionada con la lucha contra el terrorismo.
“Debido al terrorismo internacional sin precedentes que sufrió Siria durante largo periodo de tiempo, y en el que se implicaron países, gobiernos, instituciones financieras y servicios de inteligencia, y en el marco de los tremendos esfuerzos realizados por el gobierno sirio para enfrentar este terrorismo, hemos tenido una gran experiencia en este campo, la cual podemos aprovechar en el contexto de cualquier revisión actual o posterior de la Estrategia integral de las Naciones Unidas contra el terrorismo”, dijo Sabbagh.
Explicó que Siria, durante décadas, alertó de la amenaza terrorista y mostró interés para cooperar continuamente con las Naciones Unidas y los organismos internacionales relevantes, y exigió a sus órganos que tomen decisiones y medidas prácticas para enfrentar esta amenaza y secar sus fuentes de financiación.
Uno de los resultados de las políticas hostiles de algunos gobiernos contra Siria es el fenómeno de enviar miles de terroristas extranjeros y sus familias de más de 100 países y su presencia en suelo sirio para servir las agendas subversivas de esos gobiernos, remarcó.
Denunció que los gobiernos de algunos países evaden deliberadamente sus obligaciones legales y toman medidas unilaterales como la revocación de la nacionalidad o la ciudadanía a esos terroristas lo cual complica este problema en lugar de resolverlo.
El diplomático aclaró que el hecho que algunos estados miembros realicen clasificación individual, ilegal e ilegítima de ciertos países dentro de los llamados “estados patrocinadores del terrorismo” o formar alianzas ilegales con el pretexto de combatir el terrorismo sin autorización de las Naciones Unidas o el permiso del estado en cuestión, no puede dar ningún tipo de credibilidad a las alegaciones de esos países sobre la lucha contra el terrorismo.
Sabbagh concluyó su intervención con enfatizar que el gobierno sirio continuará ejerciendo su derecho soberano y deber nacional destinado a eliminar el terrorismo en todas sus formas, secar sus fuentes y garantizar la seguridad y prosperidad del pueblo sirio.
fm