Moscú, SANA
La portavoz de la Cancillería rusa, Maria Zajarova, dijo que las medidas económicas coercitivas impuestas por Estados Unidos y Occidente a Siria dificultan aún más las condiciones socio-económicas y, obstaculizan la reconstrucción y la prestación de subsidios a los ciudadanos.
Zajarova recordó que esos mismos países occidentales derramaban otrora “lágrimas de cocodrilo” por los sirios.
En una declaración de prensa, la vocera rusa explicó que se están ultimando los preparativos de la Conferencia Internacional para los Refugiados que se celebrará los días 11 y 12 de noviembre en Damasco.
Destacó el gran interés de Rusia por esta conferencia y llamó a los países de la región y a las instituciones de las Naciones Unidas para que respondan positivamente a las invitaciones cursadas por el Gobierno sirio para asistir a la conferencia y participar en sus labores.
Asimismo expresó la preocupación de su país por los ataques de la organización terrorista Daesh en la región siria de Al-Jazira, y por la presencia de células durmientes en el este y centro del país, así como por las prácticas de la milicia FDS respaldada por EEUU. Hizo alusión a la determinación de las tribus árabes por hacer frente a tales prácticas y ayudar al ejército sirio a combatir a los terroristas.
El Viceprimer Ministro y Ministro de Exteriores y Emigrantes, Walid Al-Moallem, durante su reunión con el Enviado Especial del Secretario General de las Naciones Unidas a Siria, Geir Pedersen, el 25 del mes pasado, anunció la intención del gobierno sirio de celebrar una conferencia internacional sobre los refugiados los días 11 y 12 del mes en curso, y criticó el papel de Occidente que pone precondiciones e inventa excusas para obstaculizar el regreso de los refugiados sirios a su patria.
ah/r.sh