Hama, SANA
El capitán piloto Ali Mohsen Ali, perdió a una de sus piernas durante el cumplimiento de su deber junto a los compañeros de armas en la lucha contra el terrorismo.
Ali es un ejemplo a seguir por su trabajo exitoso que no se ha visto limitado por la lesión sino al contrario, pues Ali fundó un grupo de voluntariado en su poblado que trabaja codo a codo con las entidades gubernamentales y civiles por el desarrollo local.
El lesionado Ali, quien perdió una de sus piernas durante la guerra, ha hecho aportes notables tanto a nivel personal como a nivel del trabajo voluntario en su pueblo Bechnin situado en el campo occidental de Hama.
La voluntad desafiante es uno de los más destacados rasgos del capitán lesionado pues realizó una caminata desde Hama hasta Damasco (240 km) como mensaje de lealtad a las almas de los caídos, además fundó un club deportivo en su poblado para niños donde se entrena en los diferentes juegos deportivos.
Su proyecto no se detuvo allí sino que trabajó por la creación de un equipo de voluntariado integrado por estudiantes universitarios, profesores y empleados en una experiencia que es la primera de su tipo en la provincia de Hama cuyo objetivo es mejorar los servicios y los cultivos.
En una entrevista con SANA, Ali dijo: “la fundación del equipo vino después de la caminata “Voluntad y Desafío” con el objetivo de mejorar la realidad de servicios y el entorno medioambiental y social en mi pueblo Bechnin en colaboración con las instituciones gubernamentales en las actuales circunstancias.”
Relató que su equipo instaló ya cinco alcántaras de cemento en las tierras de difícil acceso para los campesinos sobre todo en la temporada lluviosa, además sembró miles de vástagos de árboles forestales, y que él mismo plantó cinco mil arbolitos en marco de la campaña “Reforestar a Siria”.
rsh/fm