Teherán, SANA
Los ataques coheteríles de Irán contra la base Ayn Al-Assad de EE.UU. en Irak provocaron la muerte de decenas de soldados estadounidenses.
Una fuente del Cuerpo de Guardianes de la Revolución Islámica de Irán (CGRI) declaró que “Al menos 80 militares estadounidenses han muerto.
Indicó que los ataques también causaron daños graves en los aviones no tripulados, helicópteros y amplios equipos militares.
La fuente aseveró que “ninguno” de los 15 misiles disparados contra la base han sido interceptados por el sistema antiaérea del Ejército terrorista de EE.UU.
Por su parte, el portavoz del gobierno iraní, Ali Rabei, dijo que Irán “no busca la guerra, pero cualquier otra agresión estadounidense enfrentaría una respuesta más severa”.
La fuerza aeroespacial de la Guardia Revolucionaria iraní había anunciado que efectuó un bombardeo con docenas de misiles balísticos contra la base estadounidense de Ain al-Assad en el oeste de Irak.
El bombardeo se llevó a cabo en respuesta al asesinato del teniente general Qassem Soleimani y sus compañeros.
En un comunicado citado por la Agencia de Noticias Fars, la Guardia Revolucionaria iraní confirmó que los misiles son del tipo “tierra-tierra” y fueron lanzados desde la ciudad de Islamabad, en el oeste de Irán.
F.M/ E.D